Barracuda, velocista del océano

La Barracuda es un pez perteneciente al género de los esfirenos, y además de por barracuda se le conoce como Espetón, Peto, Picuda, o por su nombre científico Sphyraena sphyraena. Son peces carnívoros, que vamos a encontrar en todos los mares tropicales y subtropicales.

Las barracudas normalmente se alimentan de peces pequeños, como sardinas, bogas o jureles, que rodean hasta que forman grandes bolas de “pasto”. Después y gracias a su tremenda aceleración atraviesan la bola de peces atrapando entre sus potentes mandíbulas a las desprevenidas presas.

Su cuerpo tiene un marcado diseño hidrodinámico y su gran aleta caudal le permite alcanzar grandes velocidades con una gran aceleración. Se ha estimado que la gran barracuda puede acelerar de 0 a 90 km/h en pocos segundos.

Si creéis que es exagerado el valor de la aceleración de las barracudas, ya que generalmente cuando están en banco no hacen uso de esa capacidad, atended a este vídeo para observar claramente la capacidad de aceleración de la barracuda.

Los ejemplares jóvenes suelen agruparse en grandes bancos para nadar o cazar, cosa poco frecuente entre los peces denominados depredadores que normalmente actuar en solitario. En el caso de las barracudas, solo los individuos de mayor tamaño dentro del banco actúan en solitario.

Además de cazar en bancos, cuando se desplaza en solitario suele acechar a sus víctimas, permaneciendo inmóvil o nadando despacio, para en el último momento, acelerar y atacar a su presa. En caso de errar y que la presa salga huyendo, la barracuda no suele continuar la persecución y prefiere volver a acechar a su siguiente presa.

También son carroñeras, y es frecuente verlas acompañar a depredadores más grandes en busca de los restos de sus banquetes.

Es por esto último, que a veces los ejemplares solitarios se acercan a los buceadores, confundiéndonos con depredadores y esperando encontrar algún despojo. Dado que son peces que se guían por la vista, y muy rápidos en actuar, cualquier brillo o destello en alguna pieza de nuestro equipo puede hacerlas pensar en algún resto de pez, y lanzarse hacia los buzos. Así que desde Buceo ibérico recomendamos que cuando te encuentres en una zona donde haya muchas barracudas, trates de no llevar objetos brillantes en tu equipo.